Budweiser, la cerveza más icónica del mundo, salta al campo. Y es que, está hecha a base de lúpulo, ambición, fútbol y calle. Mucha calle. El problema: en nuestro mercado no es tan conocida como en el resto del mundo. Por eso, en un momento clave como el Mundial de Qatar, necesitábamos crear una propuesta 360º con la que conectar con el fan local y diferenciarnos de la competencia. Apostamos por un enfoque inspiracional que trabajase el territorio del fútbol tanto dentro como fuera del campo y lanzamos nuestro propia selección. Un equipo compuesto por creadores expertos en fútbol y cultura urbana con los que conseguimos crear un universo de contenidos de valor durante todo el Mundial y liderar la conversación en redes sociales.